El Origen del Amor

Cuando la tierra todavía era plana y las nubes eran de fuego,
y las montañas se estiraban hasta el cielo, a veces más alto...

La gente vagaba por la tierra como grandes barriles rodantes.
Tenían dos pares de brazos, tenían dos pares de piernas,
tenían dos rostros en una misma cabeza gigante
para poder mirar todo alrededor de ellos mientras hablaban y mientras leían.
Y nunca supieron nada del amor.
Fue antes del origen del amor.

En aquel entonces había tres sexos.
Uno se asemejaba a dos hombres pegados espalda con espalda,
los llamaban los hijos de la tierra.
E iguales a ellos en forma y tamaño eran los hijos de la tierra,
parecían dos niñas enrolladas en una.
Y los hijos de la luna parecían un tenedor unido a una cuchara,
eran parte sol, parte tierra, parte hija, parte hijo.

Entonces los dioses se asustaron bastante de nuestra fuerza y poder,
y Thor dijo "Voy a matarlos a todos con mi martillo, como mate a los gigantes".
Pero Zeus dijo "No, mejor dejame a mi. Usare mis rayos como tijeras,
como cuando corte las patas de las ballenas y convertí a los dinosaurios en lagartos".
Y luego tomo unos rayos, dejo largar una risa
y dijo "Los cortare a la mitad, los partiré en dos"
Y las nubes de tormenta se juntaron allá arriba formando grandes bolas de fuego.

Y luego el fuego cayó desde el cielo en forma de rayos como brillantes hojas de cuchillos,
y cortaron la carne de los hijos del sol, la luna y la tierra.
Y un dios indio suturo la herida en forma de agujero
y la puso en nuestras panzas para recordarnos el precio que pagamos.
Y Osiris y los dioses del Nilo formaron una gran tormenta para provocar un huracán
que nos dispersara en una inundación de viento y lluvia,
un mar de olas gigantescas para hacernos desaparecer a todos.
Y si no nos portamos bien nos van a volver a cortar
e iremos por allí saltando en una pata y viendo a través de un solo ojo...

La última vez que te vi, acabábamos de dividirnos en dos.
Vos me mirabas, yo te miraba.
Tenias algo tan familiar que no pude reconocer
porque tenias sangre en la cara y yo tenia sangre en los ojos;
pero podría jurar por tu expresión
que el dolor en tu corazón era el mismo que había en el mío.

Ese es el dolor que corta en línea recta a través del corazón.
Lo llamamos amor.
Nos abrazamos el uno al otro, tratamos de unirnos nuevamente,
estábamos haciendo el amor.
Fue una noche oscura y fría hace mucho tiempo cuando de la poderosa mano de un dios
tuvo lugar la triste historia en la cual nos convertimos en solitarias criaturas de dos piernas, la historia del origen del amor.

Es el origen del amor.